jueves, 30 de junio de 2011

Este no es un blog de montaña.....


... aunque lo parezca por el título. Solamente pretendo dar mi visión sobre el tema a tratar, que puede ser de cualquier índole, y expresar mi parecer al respecto.
Pero aunque el montañismo no sea el "leitmotiv" de este blog, creo que mi primera aparición debe estar dedicada a George Mallory, del que he tomado el nombre y del que ,desde su aparición en mi vida, ha supuesto alguien a quien admirar y del que tomar ejemplo.
Quizá estábamos predestinados a encontrarnos, pues murió en el Everest el mismo día que nací yo...muchos años después. Hasta el descubrimiento de su cadáver, en la impresionante cara norte del Everest en mayo de 1999, Mallory era para mi un perfecto desconocido. Cuando leí la noticia en los periódicos, me pareció fascinante que 75 años después de su muerte, su cuerpo apareciese en perfecto estado en la ladera de la montaña. Para los alpinistas Mallory era un mito y la búsqueda de su cuerpo, junto con el de Irvine, me parecía una empresa de locos. Pero según la historia de Mallory y el Everest me fue atrapando, me iba dando cuenta de la dimensión del personaje. Comencé a devorar todos los libros, artículos, vídeos, películas y cualquier material que sobre el tema caía en mis manos o pasaba por delante de mi. Llegué hasta visitar en Londres la Royal Geographical Society, patrocinadora de las primeras expediciones británicas al Everest, cuando este no tenía todavía nombre y solamente era el P-15 en los mapas, que aún tenían muchos espacios en blanco , para intentar descubrir cosas nuevas sobre su vida.
Así pues, vaya este pequeño articulo como inicio del blog y como público homenaje a mi heroe favorito.